14 de mayo de 2011

Las cosas buenas llegan sin querer

Quizás escribir esto sea cosa de niña pequeña, infantil y caprichosa... pero no sabes lo bien que me siento después de decir esto.
Hoy no ha sido un día diferente, ha sido un viernes sin más que añadir. Un viernes más con mis amigos, y con él. Por supuesto que no hemos tenido conversaciones que sobrepasen el universo pero qué le voy a hacer si soy feliz con tan solo estar a su lado, que me sonría, que me toque, que me abrace. . .
Puede hacer que mi vida cambie por completo cada vez que estoy con él, me motiva, me hace sentir princesa, me hace realmente feliz.
Y perderle sería perderme...
...en un laberinto sin fin

3 comentarios: